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La botella transparente revela un color amarillo limón.
La nariz de Crazy Branco comienza siendo enigmática como resultado del proceso de curtido en una cuba de hormigón, al que se sometían los hollejos de las uvas blancas cosechadas en las montañas. Predominan las notas minerales, casi metálicas, que sugieren un tiempo de aireación después de quitar el tapón de corcho natural.
En boca, el carácter CRAZY combina ligereza y juventud, garantizando un sabor refrescante, mineral y sin concesiones (¡10º de alcohol!).